El Sumo Pontífice afirmó que reza «por los heridos y por los que han perdido la vida, muchos… y por sus familias».
El Papa Francisco expresó este domingo su cercanía al «querido pueblo de Marruecos, golpeado por un devastador terremoto» y pidió «que la ayuda concreta de todos pueda sostener a la población en este momento trágico», en un mensaje al final del rezo dominical del ángelus en la plaza de San Pedro.
El Papa también afirmó que reza «por los heridos y por los que han perdido la vida, muchos… y por sus familias» y agradeció a la labor «a los socorristas y a quienes trabajan para aliviar el sufrimiento de la gente».
«Estamos cerca del pueblo de Marruecos», agregó.
Este sábado, el Papa Francisco ya envió a la Iglesia local un telegrama en el que garantizaba «sus oraciones ante esta catástrofe natural» y se muestra «entristecido por este acontecimiento» y expresaba su «profunda solidaridad con quienes están tocados en la carne y en el corazón por esta tragedia».
El último balance es de más de dos mil muertos y más de 2.000 heridos, de los cuales muchos graves, y enteras localidades destrozadas.
El terremoto de magnitud 7 se produjo el viernes a las 23:11 hora local (22.11 GMT) a 8 kilómetros de profundidad, tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada unos 80 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech, una zona en la que, según los expertos, no se esperaba que pudiera darse un terremoto de tanta fuerza.
Con información de Agencias.