Suman tres los cantantes extranjeros asesinados en los últimos días en México, tras el hallazgo de los cuerpos sin vida de los dos jóvenes colombianos.
El artista venezolano Tayron Paredes Gamboa, de 29 años, quien había estado desaparecido desde el 19 de septiembre, fue hallado sin vida en Cocotitlán, Estado de México.
El cuerpo del joven, quien trabajaba como repartidor y también se desempeñaba como DJ en la Ciudad de México, fue descubierto en el mismo lugar donde días antes se encontraron los restos de los músicos colombianos B-King y DJ Regio Clown.
La desaparición de Paredes generó una creciente preocupación entre sus familiares y amigos, especialmente después de conocerse los últimos mensajes que envió a través de WhatsApp. En uno de estos mensajes, enviado el viernes pasado a las 4:47 de la tarde, el joven mencionaba que lo habían llevado a un área despoblada, describiéndola como un lugar lleno de monte.
A partir de ese momento, sus allegados perdieron contacto con él y decidieron alertar a las autoridades.
Tristemente, la búsqueda concluyó con el hallazgo de su cuerpo sin vida.
La Fiscalía General de México señaló que las tres víctimas podrían haber sido secuestradas y asesinadas, presuntamente por integrantes del grupo criminal “La Familia Michoacana”.
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Además, las autoridades investigan si existía algún vínculo entre los artistas y organizaciones dedicadas al narcotráfico. Sin embargo, no descartan otras motivaciones detrás del crimen.
Este homicidio se suma al caso de los músicos colombianos Bayron Sánchez Salazar (B-King) y Jorge Luis Herrera Ramos (DJ Regio Clown). A ellos los encontraron sin vida en un terreno baldío del Estado de México.
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Según los informes, las víctimas habían sido atadas de pies y manos, torturadas y desmembradas. Las evidencias apuntan a una posible relación con el crimen organizado en estos asesinatos.
