Está previsto la apertura de una exposición pictórica individual del amigo y hermano, el artista plástico José Gregorio Hernández, quien recientemente cambió de paisaje.
El venidero 27 de septiembre, el Ateneo de Punto Fijo Rubén Ismael Padilla llega a la muy respetable edad de 58 años. Trayectoria marcada por tropiezos, gestiones, logros, reivindicaciones y satisfacciones para el sector cultural paraguanero.
Ese mismo día, el edificio de la institución rectora de la cultura en Paraguaná cumple veinte años de su entrega, tras años de desidia para la culminación del inmueble que es ahora toda una referencia de la cultura peninsular.
Para conmemorar tan importante fecha, ese día está previsto la apertura de una exposición pictórica individual del amigo y hermano, el artista plástico José Gregorio Hernández, quien recientemente cambió de paisaje y hoy se encuentra pintando angelitos en el paraíso celestial. Ocasión en la que también estuviera celebrando sus 63 años de vida.
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Luego de este preámbulo, en el auditorio se disfrutará del teatro Unearte, dirigido por Eduardo Zavala, y de las piezas «Pasos incesantes» y «Dolor que no termina» con la agrupación matriz del Ateneo: Yuxtadanza. También se contará con la presencia del poeta y cronista Guillermo de León Calles, único directivo fundador del Ateneo que está entre nosotros.
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La ocasión es propicia para invitar a la colectividad en tan significativa fecha y conozca de primera mano lo que marca el relanzamiento del Ateneo de Punto Fijo Rubén Ismael Padilla, bajo la presidencia de Luben Martínez.
Fátima Delgado/Ateneo de Punto Fijo.
