Las poblaciones de Adaure y Barunú del municipio Falcón alcanzan las dos décadas sin recibir agua por acueducto.
Desde esa fecha, aproximadamente hace 20 años, los residentes de esas zonas rurales hacen lo posible para poder adquirir el vital líquido.
La situación fue dada a conocer por la habitante de Adaure y presidenta del Concejo Municipal Falcón, Jennys Atacho Díaz.
Explicó que Hidrofalcón realiza algunos acondicionamientos en la estación de bombeo Misaray que lleva el agua de Moruy hasta Buena Vista, pero para las comunidades de Adaure y Barunú se hace imposible al no contar con ramales o sistema de distribución.
Atacho Díaz dio a conocer que la única forma de llegarles el agua sería a través de operativos con cisterna del cual ya no recuerdan cuando fue la última vez.
Además, añadió que los operativos por cisternas no cubren las necesidades del hogar al dejar entre dos o tres pipas por familia.
Las familias se ven en la obligación de comprar el agua por pipas el cual tiene un valor de tres dólares y se hace imposible para muchas personas poder adquirirla.
Comparó que los abuelos tienen una pensión de tres dólares para comprar una pipa de agua.
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Destacó que la población de Adaure se surte de agua de pozo salobre y de un tanque llamado «El Potrero» donde toda la población busca allí para el consumo humano.
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Comparó que la población de Barunú cuenta con dos pozos profundos de agua salada que no es apta para el consumo humano.
La presidenta de Concefalcón, Jennys Atacho Díaz hace el llamado a Hidrofalcón, al Ministerio del Poder Popular Para Las Aguas y al Gobernador del Estado Falcón, Victor Clark para que se recuerden que en estas poblaciones existen familias que requieren de una vida digna, de poder consumir agua potable que les permita una vida sin riesgos a la salud.
