España goleó fácilmente 3-0 a una pasiva selección de Costa Rica y se proyectó como seria contendiente a levantar la copa, en el debut de ambos conjuntos en el Mundial Femenino.
Muy superior a su rival, el equipo español sentenció el duelo en la primera media hora, con un autogol de Valeria del Campo (21) y tantos de Aitana Bonmatí (23) y Esther González (27).
La doble Balón de Oro Alexia Putellas, que sigue con su proceso de recuperación de la grave lesión de rodilla sufrida hace justo un año, disputó los últimos 20 minutos.
El marcador apenas reflejó la amplia superioridad de las españolas, un equipo de gran dinámica y despliegue físico, frente al equipo lento y estático de Costa Rica, en un partido disputado bajo una llovizna y el frío austral.
El suspense apenas duró una veintena de minutos. España se fue arriba en el minuto 21 con un autogol de Valeria del Campo tras un cruce de Esther González.
Tres minutos después, Aitana Bonmatí amplió las cifras con un disparo dentro del área y la paliza se hizo evidente la 27, cuando González se hizo presente en el marcador con un disparo de volea.
Cuando parecía que venía el cuarto gol, la portera Daniela Solera, la más destacada del equipo tico, le contuvo un penal a Jennifer Hermoso.
Veinte minutos para Putellas
Las dos selecciones salieron al campo sin sus jugadoras más destacadas, ambas en la banca. Putellas sigue entre algodones de su lesión de rodilla del año pasado y entró en el minuto 77 en el lugar de Salma Paralluelo para debutar en el Mundial.
En Costa Rica, «el cuerpo técnico decidió no arriesgar a la futbolista» Raquel Rodríguez por una lesión reciente, según portavoces del equipo.
Con un estadio a dos tercios de su capacidad (unos 25.000 espectadores), la afición neozelandesa pareció identificarse mayoritariamente con el débil equipo tico, coreando «Costa Rica» al ritmo de tambores de una pequeña y bulliciosa barra tica.
Pero fue España la tuvo pleno control de las acciones de principio a fin, mientras las centroamericanas se replegaron en su mitad del terreno para contener al rival.
Frente al empuje de jugadoras como la habilidosa delantera Salma Paralluelo, la calidad técnica de Aitana Bonmatí y la veloz lateral Olga Carmona, Costa Rica dependió del empuje de su volante ofensiva Melissa Herrera, una todoterreno responsable de las pocas acciones de peligro ticas.
Las centroamericanas intentaron equilibrar un poco las acciones en el segundo tiempo, con más intervenciones de su 10, Gloriana Villalobos, pero fue insuficiente ante la superioridad de las europeas.
«Tenemos que ser autocríticas y reconocer que el resultado tenía que haber sido mayor, pero también el rival juega, estamos en un Mundial, todo el mundo aprieta muchísimo», declaró Esther González, autora de uno de los goles españoles.
«Pero también hay que disfrutarlo, hay que celebrarlo porque no es fácil», agregó.
Uno de los motivos por los que España no anotó más goles fue la arquera costarricense Daniela Solera, quien paró la metralla roja en sus momentos de más intensidad.
«Cuando cayó el autogol fue una desconcentración y de ahí cayeron otros dos goles. Siempre tenemos que estar concentradas», explicó Solera a AFP.
El golpe de autoridad dejó manifiesto que las españolas llegaron al Mundial Femenino como contendientes al título.
El resultado dio a España los primeros tres puntos del Grupo C, que completan Japón y Zambia, que se medirán el sábado.
Con información de Agencias.